Con cuánta alegría esperamos ese día para estar juntos con la familia, los amigos y demás seres queridos con quienes compartimos lo bueno, lo hermoso y lo agradable que hemos vivido durante el año. Cada uno de alguna manera colaboró para mejorar parte de su ambiente y de su vida y para hacer sentir algo mejor a los demás. La Navidad es un obsequio para el ser humano ya que en estas fechas nuestro lado sensible cobra fuerza en nuestro interior y nos hace buscar la paz espiritual, donde nacen momentos de ternura, momentos de querer abrazar, besar, y disfrutar del gesto de dar y recibir.
Podemos sentir la magia de un cálido momento navideño al abrir un regalo y poder compartir ese momento de emoción con la persona amada. La Navidad es estar en paz con uno mismo, es poder decir gracias; gracias por otro año, por otra Navidad, por la fortaleza mantenida durante este año de lucha que concluye con la reconfortante sensación de una dulce y merecida recompensa.
Gracias por hacer de esta Navidad la mejor y la más especial. Gracias por seguir amándonos, por el entusiasmo de continuar la carrera de la vida y de empezar otro nuevo año llenos de ilusión y nuevos sueños por cumplir.
¡Feliz Navidad y Próspero Año Nuevo 2009!
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